lunes, 28 de septiembre de 2015

MAMÁ, TU QUE ERES TAN MAÑOSA....

Seguro que esta frase os suena. Ya sea dicha por un hijo, un hermano, una cuñada o una prima lejana.....¡pues una vez más, me la han dicho!. Me echo a temblar cuando la escucho, porque quiere decir que no es cosa fácil lo que tienen pensado para nosotr@s."OYE, TU QUE ERES TAN MAÑOSA". Ojos como platos al momento, palpitaciones y ganas de echar a correr.
Laura tenía un mueblecito que le hicieron a medida a mi padre para dentro de su escritorio. Mi querida , pero" lianta" hija pensó hace tiempo adaptarlo para el suyo. "Mamá es que es un poco grande, pero seguro que tu tienes ideas para solucionarlo". En una palabra y para no enrollarme demasiado, como siempre, que he tenido que hacer casi el mueble nuevo. He cortado con la sierra, lijado muchísimo, encolado, enmasillado desperfectos, etc. Todo esto al margen del tuneo elegido para la pieza en cuestión. Hablamos de un mueble que estaba hecho hace mucho, o sea como los de antes, resistente a un tsunami 8.7 en la escala ritcher.... ¡Lo que ha costado desmontarlo!. Al fin pude con él. pues no soy yo cabezota ante las adversidades...  y aquí dejo patente la nueva versión del" mueblito de escritorio" en cuestión.
Por favor os lo pido, no me vayáis a decir ahora que no os gusta, por caridad jajajaaaa. 
Así ha quedado.



Así era. Como ves, no cabía dentro del escritorio.



Observa que aquí, ya he cortado un trozo grande y reformado los compartimentos. Lo peor  ya está (lijado, enmasillado claveteado etc.). No he querido poner todas las fotos para no aburrirte.



Mejor me empleo a fondo con el acabado que es lo más bonito y lo que más nos gusta. Ya es diferente. Los cajones, que también tuve que reformar por el tamaño, están en otro lugar.



Para forrar la trasera y el interior de los cajones, utilicé un papel de escritura antigua que luego envejecí y barnicé para proteger. El resto con pintura a la tiza blanca.



Pomos de porcelana.












Ahora parece hecho a medida.¡ Buuuffff que trabajera!















 Laura ha quedado muy contenta.Yo también al verla a ella. ¿Que será lo próximo?. Os confieso una cosa, aunque seguro que ya lo habéis adivinado: He disfrutado de lo lindo. Cuanto más complicación, más se disfruta, ¿a que si? jajajaa