Son dos cajas unidas que forman una más grande. Están envejecidas con una pátina de aceite de linaza, betún de judea y aguarrás. Muy desgastadas para que tengan éste aspecto tan desgastado que mi amiga deseaba. Se lee la palabra Recycle que está dibujada a mano alzada con letras mayúsculas muy básicas y sencillas. Unas ruedas hacen que éste contenedor sea más práctico de llevar de un sitio a otro. Está hecha tal cual me pidió Toñi.
El resultado final fue entre rústico e industrial, dependiendo de los elementos que la rodeen..
Nunca me cansaré de alabar las virtudes de las cajas de fruta. Yo cuento con bastantes gracias a ésta querida amiga que me ha regalado un buen número.
También hice una sencilla corona de brezo para su presentación. Tuvo bastante aceptación.
Estos contenedores sirven igual "para un roto, que para un descosido". pueden albergar en su interior plantas, cojines, nuestras queridas mantitas o cualquier objeto que nos parezca oportuno.
Decoran en cualquier rincón y son muy versátiles y prácticas.
En fin.... que a mi me encantan, como siempre he manifestado.
Me declaro, una vez más, fan absoluta de éstas cajas- contenedor.
Muchas gracias por el tiempo que has empleado en visitarme. Espero no haberte defraudado y que hayas disfrutado. Nos vemos pronto de nuevo.