Parte del trabajo ha consistido en recuperar la pantalla que estaba algo "perjudicada". La he forrado con una tela de lino en tono tierra, añadido unos ribetes en cuadros vichy y un estarcido en blanco cáscara de huevo.
Como remate final un guiño de coquetería: unas pequeñas lágrimas de nácar que he ido cosiendo.
Sobre el pie, solamente decir que le he dado una manita suave de lija y pintado en el mismo color blanco cáscara de huevo. Después un muy ligero desgaste en alguna zona estratégica y ¡listo!.
Aquí te muestro el antes de la lámpara. No se aprecia muy bien, pero la pantalla, abollada, era de color verde.
Espero que hayas pasado un momento agradable y si puedo ayudarte con alguna idea, mejor todavía.
Muchas gracias por tu tiempo y hasta pronto.